- 100 gr de avellanas naturales sin tostar
- 1/2 tableta de chocolate negro
- 1 vaso de leche de avellana
Cobertura:
- Chocolate negro
- 1 cucharadita de aceite de coco
- Avellanas picadas
Elaboración:
Ponemos en el vaso batidor las avellanas enteras y las picamos a máxima potencia 2-3 minutos. Incorporamos el chocolate fundido en el microondas (yo lo pongo 2 veces a máxima potencia y 30 segundos cada vez, luego ya removiendo con la cuchara y el calor residual se termina de fundir) y añadimos poco a poco la leche de avellana con la batidora en marcha.
Colamos la mezcla con un colador o bolsa de leche vegetal (sino tenéis, podéis utilizar un colador y encima una gasa y coláis sin parar de remover).
Vertemos la mezcla colada sobre los moldes de silicona y metemos en el congelador unas 4 horas.
Preparamos la cobertura fundiendo chocolate negro con una cucharadita de aceite de coco y cubrimos los polos. Añadimos sobre el chocolate fundido unas avellanas picadas para darles un toque crocanti y volvemos a meter en el congelador.
Ya solo queda disfrutar de este refrescante y sabroso helado.
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